Lockheed J37

El Lockheed J37 (con registro interno en la compañía L-1000) fue uno de los primeros motores turborreactores diseñados en Estados Unidos. No fue considerado de gran importancia cuando fue propuesto en la década de 1930 y su desarrollo se dejó de lado. Para cuando se desarrolló para poder ser producido, otros motores, en su mayoría derivados de desarrollos británicos, le superaban en rendimiento. Su diseño fue convertido luego a turbohélice, el T35, y fue vendido a Wright Aeronautical en donde se recibió con cierto interés para poder ser usado en lo que se convertiría más tarde en el B-52 Stratofortress, antes de que el diseño final del bombardero se definiera con motores de propulsión a chorro. Del J37 y T35 se construyeron en unidades suficientes para poder ser usados en modelos de prueba

Lockheed J37

El Lockheed J37 (con registro interno en la compañía L-1000) fue uno de los primeros motores turborreactores diseñados en Estados Unidos. No fue considerado de gran importancia cuando fue propuesto en la década de 1930 y su desarrollo se dejó de lado. Para cuando se desarrolló para poder ser producido, otros motores, en su mayoría derivados de desarrollos británicos, le superaban en rendimiento. Su diseño fue convertido luego a turbohélice, el T35, y fue vendido a Wright Aeronautical en donde se recibió con cierto interés para poder ser usado en lo que se convertiría más tarde en el B-52 Stratofortress, antes de que el diseño final del bombardero se definiera con motores de propulsión a chorro. Del J37 y T35 se construyeron en unidades suficientes para poder ser usados en modelos de prueba